NOTA AL LECTOR:
Quiero aclarar que este no es un ensayo periodístico, como lo he querido hacer en este blog, sino uno de opinión. Uno en el que, como ciudadana, expreso mi pesar, mi opinión y, sobre todo, mi sentimiento sobre el sistema de “pico y placa” que va a imperar en la ciudad desde la próxima semana. Sin estudios previos, sin alternativas… andamos fregados (complicados, jodidos) todos. Ya verán que el remedio resultó peor que la enfermedad.
Martes 27 de abril de 2010, 6h50 am. Me encuentro en la parada del puente 9, en la autopista General Rumiñahui a fin de llegar antes de las 8h00 a clases de Taller de Tesis I, pues tenía que imprimir mi primer borrador de plan. En vista que no hubo un bus Vingala o Turismo que me lleve a la Universidad Católica, tuve que tomar un Amaguaña. Como todo bus en hora pico, era uno tipo, pero tipo sardinas. Ya ni modo. Dos veces que he llegado a clases realmente enferma, no quería faltar a otra clase más ni tener la vergüenza de atrasarme. Estuve de pie, tomándome del primer tubo que encontré y junto a alrededor de 90 personas, recorrer la autopista “a paso de tortuga” (por el bus y por la misma congestión) para llegar a El Trébol y ahí tomar otro bus para llegar a mi universidad. Aparentemente se debió habilitar el tercer carril para que se convierta, como hace mucho tiempo, uno que permita el acceso de Valle a Quito. Pero no, la Policía no adecuó este carril y todos hicimos fila, cual niños de jardín de infantes tomando distancia. Pasaban los minutos. Eran las 8h10 cuando llegué, luego de lloros y ruegos a El Trébol. Me dije, tomaré un taxi. Per o no. Como cosa rarísima en este sector, no hubo taxi para rescatarme. Me vi en la obligación de tomar un Camal-Aeropuerto para llegar algo cerca (en las calles Orellana y 6 de diciembre), caminar dos cuadras y llegar a FLACSO. Quería llegar, mas no pude. La Gloriosa Policía Nacional creó congestión en la Avenida Oriental, en lugar de reducirla. Otra vez caminamos a paso de tortuga. Finalmente fueron las 8h40 cuando llegué a FLACSO. Casi dos horas de recorrido. NI QUE VIVIESE EN MACHACHI O EN PISULÍ. Me dio vergüenza entrar, falté a clases otra vez. Sé que ni Mauro, mi profe, ni nadie lo va a entender y que todo ocurre adrede, porque nadie sabe lo que pasa en la olla, salvo la cuchara (tal y como lo hicieron hoy mis dos compañeros que, si leen esto, espero que no se ofendan, pero por lo menos, por educación, debían saludar ya que me ven esperando en la sala de junto por justificar mi falta) Pero todo esto le debo al alcalde Barrera, Todos se lo debemos.
GRACIAS POR NADA!!!!
GRACIAS POR INVENTARSE EL AGUA TIBIA!!!
-Al menos entregué mi borrador previo, ojalá no me haga perder la materia. Es la tercera vez, parece coincidencia. Solo difiere de otras dos veces el estar enferma, a punto de morirme literalmente (y no exagero)-
Desde hace dos meses para acá, el tránsito en Quito es un verdadero caos. No sólo por ser la ciudad con mayor número de vehículos a nivel nacional, gracias a que el 60% de la población trabaja exclusivamente en oficinas. Ni tampoco por el “hermoso y maravilloso” (y lo digo entre comillas, como diría mi hermano “guiño guiño, nariz nariz”) transporte público, tan exclusivo que por pagar 40 centavos, vamos en un bus exclusivo, pero exclusivo para sardinas. Pues todos debemos hacernos sardinas para poder tomar el colectivo, especialmente en horas pico. Eso ni hablar del trolebús, el metro bus, los buses del sur y los higiénicos buses interparroquiales Quito-donde sea (refiérase Carapungo, Pisulí, Cumbayá, Alangasí, Guayllabamba, Amaguaña, etc), donde los asientos son de lujo y hasta el trato de “pfff… mijitash o reiniiiita” caracteriza a tan singulares trabajadores. Sino también porque, pese a la sacadera de madre de la “involución ciudadana” por aumentar impuestos a ciertas importaciones –entre ellas la de los automóviles- el marketing impera y ahora es mucho más fácil adquirir un vehículo, desde una marca exclusiva, hasta uno bien “cualquier cosa”.
La interrogante es el por qué digo esto. Simplemente porque desde (les invito a hacer memoria) el tan ansiado anuncio de esta medida (a mi modo de ver, invento del agua tibia del alcalde Barrera), la congestión se ha incrementado en demasía.
Vivo en el mero límite entre Conocoto y San Rafael. Debo caminar alrededor de seis cuadras para llegar al puente nueve y, en horas pico, demorarme aproximadamente una hora para llegar a mi destino. Generalmente la parada de la PUCE. En cambio en horas normales, unos cuarenta o cincuenta minutos, con trayectos adicionales y demás. Sin embargo ahora, gracias al “pico y placa”, debo salir con media hora de anticipación -adicional al tiempo que calculo demorarme- para llegar a mi destino, muchas veces EN TAXI. Lo que generalmente sucede cuando voy a mi universidad y nadie sabe y nadie va a entender, y a la oficina.
Pero si creen que esto ocurre solo en transportarse del Valle a Quito, mucho peor es en Quito mismo. De las oficinas de la Corporación Financiera Nacional a FLACSO, increíble, pero cierto, uno llega a demorarse 45 MINUTOS EN BUS, en lugar de los quince que realmente deberían transcurrir. En taxi, ni hablar. A más de la demora, es el costo de la carrera.
Con mi ejemplo palpable y el de muchas personas que se escucha en los noticieros, en las radios, en los taxis y hasta en las oficinas quienes viven la misma situación, se puede indagar con facilidad que se creó una congestión ficticia. A más que cerraron ciertos accesos que antes eran de uso recurrente para acceder al perímetro de Quito, contamos en cada esquina con el lindo “apoyo policial” quienes, en lugar de agilizar, PARALIZAN EL TRÁNSITO, así como también con la ayuda de la “Policía Metropolitana”, quienes a más de molestar, no hacen nada más.
¿Acaso creen que con esta medida dictada por el alcalde Barrera veremos en el “pico y placa” la solución de los problemas? Considero que, como dicen mis amigas colombiches, NO ESTÁ NI TIBIO. Todos verán que desde la próxima semana, todo será peor. A más de no haber automóviles, por los días de restricción, no habrá bus ni taxi que tomar por la altísima demanda que poseerán.
De acuerdo con ingenieros viales -de quienes no mencionaré sus nombres- existen otras alternativas al “pico y placa”. Desde las más simples, como incrementar y mejorar el transporte público a fin de confiar en él y de paso generar empleo; usar la bicicleta, los patines, el monopatín o cualquier medio alternativo para quienes tienen el privilegio de vivir en el mero perímetro urbano; hasta las más costosas, pero que generarán beneficios, como el sincronizar los semáforos, retirar los redondeles, mejorar las calles y crear vías más fáciles de acceso, como el famoso proyecto de puente que en a Monjas con La Vicentina.
También cabe destacar qué coincidente resulta que ciertos vehículos no posean esta restricción, tal y como los vehículos de Gobierno y los diplomáticos. Más sí les hace problema a los buses escolares, pobres guaguas, y las motonetas, que irónicamente se crearon como un medio alternativo de conducción y de trabajo para los guardias de seguridad y los mensajeros. Cabe anotar que gracias a esta restricción y a que el alcalde diga de una manera “natural” en el noticiero “Buenos días América” de Radio América 104.5 fm, que ahora deban trabajar solo seis horas al día o que las oficinas regulen los horarios de envío. Parece que el señor Barrera no entiende que se necesita hacer ciertas encomiendas para gestionar en una oficina “cualquiera que esta sea”, que ahora los guardias no podrán atrapar a los ladrones porque no cuentan con un sistema de transporte motorizado ( y los ladrones sí, porque a ellos les importa un carajo esta medida) o que con esta medida perjudicarán a los mensajeros, gente que tiene esta única actividad para mantener a sus familias y a quienes les pide reducir su trabajo a la mitad. En buen romance, se incrementarán el número de desempleado MAS DE LO QUE YA ESTÁ.
¡Qué milagro se portó decente el alcalde y les dio el salvoconducto a las ambulancias y a los discapacitados! Se portó medio decente, a mi parecer.
Tristemente vemos que el alcalde desea inventarse el agua tibia, no hacer el estudio previo, como todo proyecto que se respete debería hacerlo, y no escuchar ni dar cita a quienes pueden darle otros puntos de vista totalmente factibles, sea como profesionales relacionados o como simples ciudadanos. No hay alternativa, tendremos que vivir con un proyecto que ha sido un total fracaso en ciudades como Guatemala, Bogotá, México y Caracas. El alcalde nos lleva al funesto destino de llegar a nuestros destinos “a paso de tortuga”, a que el parque automotor se triplique, a que se incremente el número de pobladores en el perímetro urbano, a que no hayan buses especialmente en horas pico.. en fin.. a que el remedio sea peor que la enfermedad.
En mi caso, a más de madrugar más que antes para estar 5h45 am en la parada del puente 9 para llegar a las 7h00 a clases “y en taxi” porque la congestión de El Trébol es insoportable; a las 6h30 para recibir a tiempo las clases de las 8h00; a las 16h45 para ir a clases de las 17h30 y hacer las horrendas filas para tomar el Vingala que me lleve a casa. Ah, también pensaba en pedir posada cada quince días en la casa de mis tíos para poder llegar a tiempo a clases de Taller de Tesis I de las 8h00,y con el tiempo vivir nuevamente en Quito y hacerme esclava de esta caótica ciudad a la que amo. Tocará, hasta que alguien con algo de cerebro y sin dejarse llevar por influencias de ninguna índole HAGA LO QUE DEBE HACER.
PD:
PARA QUIENES NO LO SABÍAN, HOY HICIERON UNA EVALUACIÓN PREVIA DEL PICO Y PLACA. LA POLICÍA REVISABA LOS VEHÍCULOS Y AVISABA A QUIEENES NO PODÍAN CIRCULAR EL DÍA MIÉRCOLES, O SEA QUIENES TIENE PLACAS 5 Y 6. ESTO OCURRIÓ EN EL PEAJE DE LA AUTOPISTA GENAERLA RUMIÑAHUI, LA CALLE MORÁN VALVERDE, LA MANUEL CORDOVA GALARZA, EL TRÉBOL, LA AV. ORELLANA, LA AV DE LOS SHYRIS Y LA PLAZA ARTIGAS.
EN POCAS PALABRAS… A MÁS DE LA CONGENSTIÓN DADA POR LAS HORAS PICO, OTRA MÁS PARA QUE VEAMOS QUE SUPUESTAMENTE HACEN ALGO A FIN QUE LOS CIUDADANOS CONOZCAMOS TAN ESTÚPIDA MEDIDA. COMO DIRÍA MI NOVIO, ¡¡¡OTRA RAYA MAS AL TIGRE!!!
bX-4d2cpu
bX-4d2cpu
2 comentarios:
Hola, encontré tu blog en google, me parece que es interesante, pero este comentario es escrito con mucha ira, pues la transmiten tus palabras, sería interesante saber tu opinión más objetiva sobre el pico y placa en la ciudad.
gracias por tu comentario.. como mencioné al inicio de este texto: no era objetiva, en definitiva que no. Prometo escribir algo ya mas serio sobre el pico y placa, como habitante de las afueras de quito y como gente que si, ha visto su beneficio en ello.
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